domingo, 7 de septiembre de 2008

Salvador Melara de las Asambleas de Dios a la Verdad

(LamparaEncendida.Net) Mi nombre es Salvador Melara, tengo 39 años, nací en la Iglesia Católica, fuí bautizado, hice mi primera comunión; desde que tengo memoria siempre me gustó la vida religiosa a tal punto que en algunos juegos de mi niñez jugaba que era sacerdote. Cuando llegué a la adolescencia tuve el deseo de ser sacerdote, se lo comuniqué a mi mamá, pero lejos de apoyarme me dijo que estaba loco, que pronto iba a conocer alguna muchacha bonita y me iba a enamorar y si me hacía cura no iba a poder porque ellos "no se casan". En 1983, un compañero de escuela comenzó a "evangelizarme", él era de las Asambleas de Dios. Después de tanto insistirme en acompañarlo al culto al fín me decidí a ir y... ¡me gustó!. Me gustaron las alabanzas, la predicación (ya no había aquel "ritual aburrido, monótono y rutinario" de las misas), y un día antes de cumplir 16 años (30 de agosto de 1983) "acepté a Cristo como mi Salvador".

Un solo bautismo, testimonio del Lic. Melara



A partír de ahí me fuí involucrando en la congregación, cuando terminé mi bachillerato (high school), comenzé a estudiar medicina pero al final del primer año, después de una convención misionera en la congregación, decidí dedicar mi vida a la vida religiosa (pero esta vez como evangelico) y comenzé a estudiar una Licenciatura en Teología en la Universidad de mi denominación. Me gradué como Licenciado en Teología en 1992, fuí misionero en Belize por un corto tiempo, y me dediqué a pastorear. Fundé tres congregaciones de las Asambleas de Dios (dos de ellas todavía funcionan pero ya no pertenecen a la denominación), y fuí pastor asociado en dos congregaciones más de la misma denominación. También fuí catedrático de Teología en la Universidad de mi denominación y de otra Universidad evangélica muy importante. En esta segunda universidad me asignan una materia llamada "Historia del pensamiento cristiano", y eso me hizo estudiar a los padres de la Iglesia, y NUNCA me había percatado que los padres de la Iglesia habían sido CATOLICOS. Comienzo a rastrear la historia de mi denominación y me doy cuenta de que:
1. Jesús dijo que el mundo nos iba a reconocer por ser "perfectos" en unidad, pero hay miles de iglesias evangélicas y todas productos de divisiones de otras iglesias
2. Mi denominación fue producto de una división por una supuesta visita del Espíritu Santo
3. Me enseñaron a odiar a la Iglesia Católica y me dijeron que era la "Gran Ramera", y "guarida de demonios", pero cuando la comenzé a conocer me encontré con expresiones como "Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu Santo"... en la Hora Santa se dice "Bendito sea Dios, Bendito sea su Santo Nombre, Bendita sea la preciosa sangre de Jesucristo, etc.." en el rito de comunión se dice "Líbranos Señor de todos los males y concédenos la paz en nuestros días para que ayudados por tu misericordia vivamos siempre libres de pecado y protegidos de toda perturbación mientras esperamos la gloriosa venida de Nuestro Señor Jesucristo... Tuyo es el Reino, tuyo el Poder y la Gloria por siempre Señor.. Un demonio JAMAS puede decir eso...
4. Me dijeron que los católicos le han añadido libros a la Biblia y descubrí que en el s. XIX, Sociedades Bíblicas quitó los libros deuterocanónicos de la versión Reina Valera (la llamada Biblia evangélica) por presiones económicas de las iglesias protestantes dominantes en esa época, porque si no los quitaba dichas iglesias no seguirían aportando el subsidio económico que recibía.
5. Pero el mayor conflicto era que me habían dicho que la Eucaristía era un invento de los católicos, que el pedacito de galleta y el refresquito de uva que tomabamos en la santa cena "representaban" el Cuerpo y la Sangre de Cristo, pero en los Evangelios y en 1 Corintios cap. 11, Jesús dice claramente "ESTO ES MI CUERPO".
A partir de ahí tuve que tomar una decisión y le comuniqué estos descubrimientos a mis esposa. Yo pensé que iba a haber una reacción negativa por parte de ella pero no.. ella ya estaba luchando contra esto desde hacía algún tiempo, pero no podía decirmelo porque yo era pastor, pero cuando supo que yo también estaba luchando, juntos buscamos la Iglesia y fuímos recibidos nuevamente después de cumplir algunos requisitos como bautizar a nuestros hijos y tomar el sacramento del matrimonio.
Este próximo mes de noviembre cumpliremos tres años de haber regresado a la Iglesia. No fué facil porque yo era pastor, profesor de teología, vivía del ministerio y todo eso se terminó de la noche a la mañana. Nos quedamos sin trabajo (fuí removido como profesor de teología), pasamos muchas necesidades después de haber tenido un nivel de vida bastante bueno, pero damos gracias a Dios que El nos sustentó, nos proveyó trabajo a ambos, y ahora con la ayuda de Dios comparto mi testimonio para ayudar a los que están dentro de la Iglesia pero que su fe es muy debil para que se afirmen en la verdadera fe, la fe católica.

Sé que he escrito bastante, pero he procurado resumir lo más que pude, y pido a Dios que estas palabras puedan ser de utilidad, y gracias por tomarse el tiempo de leerlas.
En el amor de Cristo y María

Referencias
Refugio del Señor
Lampara Encendida

El Padre Pio, San Giovanni Rotondo, Italia.


En un convento de la Hermandad de los Capuchinos, en la ladera del monte Gargano, vivió por muchísimos años el que probablemente fuera el Sacerdote Místico más destacado del siglo XX, a punto actualmente de ser declarado Santo por el Vaticano. El Padre Pío, nacido en Pietrelcina en 1887, fue un hombre rico en manifestaciones de su santidad. Enorme cantidad de milagros rodearon su vida, testimoniados por miles de personas que durante décadas concurrieron allí a confesarse. Sus Misas, a decir de los concurrentes, recordaban en forma vívida el Sacrificio y Muerte del Señor a través de la entrega con que el Padre Pío celebraba cada Eucaristía.

La Vida del Padre Pio, Primera Parte


Es notable su carisma de bilocación: la capacidad de estar presente en dos lugares al mismo tiempo, a miles de kilómetros de distancia muchas veces. El Padre Pío raramente abandonó San Giovanni Rotondo; sin embargo se lo ha visto y testimoniado curando almas y cuerpos en diversos lugares del mundo en distintas épocas. También tenía el don de ver las almas: confesarse con el Padre Pío era desnudarse ante Dios, ya que él decía los pecados y relataba las conciencias a sus sorprendidos feligreses (a veces con gran dureza y enojo, ya que tenía un fuerte carácter, especialmente cuando se ofendía seriamente a Dios). Tenía también el don de la sanación (a través de sus manos Jesús curó a muchísima gente, tanto física como espiritualmente) y el don de la profecía (anticipó hechos que luego se cumplieron al pie de la letra).

Vivió rodeado de la Presencia de Jesús y María, pero también de Santos y Angeles, y de almas que buscaban su oración, para subir desde el Purgatorio al Cielo. Pero su gracia más grande radicó, sin duda alguna, en sus estigmas: en 1918 recibe las cinco Llagas de Cristo en sus manos, en sus pies y en su costado izquierdo. Estas llagas sangraron toda su vida, aproximadamente una taza de té por día, hasta su muerte ocurrida en 1968. Múltiples estudios médicos y científicos se realizaron sobre sus Estigmas, no encontrándose nunca explicación alguna a su presencia u origen.

La Vida del Padre Pio, Segunda Parte



Su sangre y cuerpo emanaban un aroma celestial, a flores diversas, que acariciaba no solo a los asistentes a sus Misas, sino también a quienes se encontraban con él en otras ciudades del mundo, a través de sus dones de bilocación. Vivió sufriendo ataques del demonio, tanto físicos como espirituales, que se multiplicaron a medida que las conversiones y la fe crecían a su alrededor.

En diciembre de 2001 el Vaticano emite el decreto que aprueba los milagros necesarios para canonizar a nuestro héroe, San Pío de Pietrelcina y fué canonizado el 16 de julio de 2002.

Ultima misa del Padre Pio, cobertura original



Vivimos en un mundo que niega lo sobrenatural, se aferra a lo material y a todo lo que pueda ser explicado a través de la razón, o percibido por los sentidos. Sin embargo, Dios prescinde de nuestra razón y de nuestros sentidos, a la hora de someternos a las pruebas de nuestra fe. De cuando en cuando nos prodiga con regalos del mundo sobrenatural, a través del testimonio y el acceso a la divinidad de los seres Celestiales. El Padre Pío es una puerta abierta a Cristo, a María, a los ángeles y los santos. Es también un testimonio de la pequeñez del ser humano y una invitación a creer y dejar de buscar explicación a los hechos de la Divina Providencia (la voluntad de Dios), sino simplemente a unir nuestra voluntad a la de Dios, y ser lisa y llanamente su instrumento, como el Padre Pío lo fue.

La vida entera del Padre Pío no puede ser explicada a través de la razón o la lógica humana. La fe y fuerza del Santo del Gargano dan por tierra con todas las escuelas filosóficas terrenales, dejando una sola salida a todo intento de crecimiento del hombre: el encuentro con el Dios eterno, el que nos mira desde lo alto y nos pide, por medio de Su infinita Misericordia, que nos entreguemos simplemente a Su Voluntad. La negación de nuestro yo (la muerte de nuestro ego), se constituye en la principal meta de nuestra evolución, porque SÓLO DIOS ES !

Exhumación del Padre Pio, Cuarto Milenio


Debemos negarnos a nosotros mismos y vivir para y por Él. El Padre Pío vivió en la más absoluta humildad y negación de sí mismo, y miren los prodigios que Jesús hizo a través suyo !

Falsedades contra el Padre Pío por Alejandro Bermudez


Referencias
Padre Pio Catholic.Net
Pastoral Juvenil Parroquia San Antonio de Padua - CAPUCHINOS